por Paola Visca (desde Mar del Plata, Argentina) – En momentos en que los presidentes de las Américas ya se encuentran en Mar del Plata, se mantienen las controversias sobre los temas comerciales y la preparación de las resoluciones finales. En ese contexto algunos cancilleres y presidentes ofrecieron conferencias de prensa donde precisaron sus posiciones.
Brasil: “hay que desdramatizar el tema del ALCA”
El canciller de Brasil, Celso Amorim, dejó en claro que Brasil no es partidario de “enterrar el ALCA”. Sin embargo, desestimó que se pueda llegar a un acuerdo en esta instancia de la IV Cumbre de las Américas, ya que, entre otras cosas los gobiernos no han venido aquí a discutir temas comerciales, sino sociales.
Por otro lado, frente a las insistentes preguntas de los periodistas que se encontraban en la sala de prensa, enfatizó que no hay posibilidades de una discusión profunda del ALCA cuando en realidad los temas en los que hay divergencias deben ser discutidos en la OMC. Dijo que es preciso “desdramatizar el tema del ALCA”, y que se discutirá en el momento oportuno. Es necesario ser prácticos y realistas al respecto de este tema, no sirve de nada el voluntarismo, continuó.
Cuando le preguntaron su opinión sobre un ALCA sin el MERCOSUR, a raíz de comentarios formulados por el presidente mexicano Vicente Fox, afirmó que esa posibilidad es poco realista y sin una base demasiado sólida. Finalmente recordó que el tema que convoca a los presidentes es el de empleo, y problemas sociales, no el comercial, pero que los periodistas y la opinión pública han convertido al ALCA en el centro del encuentro de presidentes.
Chile: crecimiento, políticas públicas e integración
El presidente chileno Ricardo Lagos en su presentación ante la prensa comenzó afirmando que en la reunión debían converger en un conjunto de ideas, antes que en plantear las disidencias que pueden existir entre países de distintas características. Hizo hincapié en la importancia de generar políticas públicas, porque si estas no existen se está a merced del mercado. Aclaró que si no se tienen políticas públicas claras predominará el mercado, agregando que “para el mercado no somos todos iguales, para las políticas públicas sí”.
Sostuvo que las metas a conseguir son crecimiento con empleo, políticas públicas e integración, con la misma importancia cada uno de estos elementos, y en forma simultánea. Esto sería lo deseable para que las economías latinoamericanas encontraran el camino exitoso. Y subrayó que el objetivo de las políticas públicas es lograr mayor cohesión social.
Sobre los temas comerciales, Lagos sostuvo que, en su reunión bilateral con el presidente Bush, recordó los compromisos que dicho país asumió en la ONU: empezar a reducir los subsidios agrícolas para tener un comercio que se funde en reglas más justas. Expresamente subrayó que lo importante con el ALCA no es si el acuerdo va a existir o no, sino las reglas sobre las cuales se va a fundar. Tomó como ejemplo el acuerdo que Chile tiene con Bolivia: los productos bolivianos entran a su país con arancel cero, mientras que los chilenos ingresan a Bolivia con aranceles. Es decir que se debe ajustar el comercio a las necesidades y posibilidades de cada país participante, porque cada uno tiene un distinto nivel de desarrollo.
Respecto a la posibilidad de un ALCA sin MERCOSUR, sostuvo que puede existir un nivel mínimo de integración sobre el cual avanzar de acuerdo a las posibilidades de cada país. De esta manera se formaría un área de libre comercio por partes. Según el mandatario esto sería una posibilidad realista a tener en cuenta. Las dificultades para lograr el acuerdo, parten, a juicio del presidente, de las asimetrías, ya que el hecho de que los beneficios se dirijan a los más fuertes en lugar de a los más débiles no ayuda a la concreción del proyecto. Al respecto tomó el ejemplo de la Unión Europea (UE), que se formó a partir de la transferencia de recursos desde aquellos países que tenían más riqueza hacia aquellos más pobres. En resumen, lo importante es tomar en cuenta las asimetrías, las distintas realidades de los países de América Latina, pero sin embargo, contemplando la posibilidad de que existan distintos niveles de integración.
México: Proponemos negociar proyectos creativos de libre comercio
El jefe de Estado mexicano, Vicente Fox, mantuvo un extenso diálogo. Comenzó realizando una presentación de los temas tratados y principalmente del estado de los acuerdos comerciales y negociaciones que lleva adelante su país. Se refirió, primeramente, al acuerdo de México con Costa rica, considerándolo notablemente exitoso. Este tratado data de diez años de aplicación, y muestra cifras de crecimiento que el mandatario llamó virtuosas. Por ejemplo, Costa Rica incrementó en un 750% sus exportaciones durante el tiempo en que ha estado en vigencia el acuerdo, y le ha permitido a su vez la generación de empleo. Sostuvo que México, desde que forma parte del TLCAN ha incrementado en más del 50% los empleos, encontrándose en el sector exportador el 40% de los empleos y que estos son un 30% mejor remunerados que el promedio de la economía. Recalcó que en este momento hay registrados en la seguridad social la mayor cifra de trabajadores de la historia, unos 13.161.000 empleados.
Ahora México está abocado a una segunda generación de acuerdos, especialmente con aquellos con los que tiene tratados vigentes desde hace años. Avanzar hacia una “verdadera alianza estratégica”. El primero de estos acuerdos será firmado con Chile el próximo mes de diciembre, lo que a su juicio confirmaría una relación comercial exitosa entre ambos países, y se buscarán nuevos niveles de integración. Para Fox, hay que saber aprovechar las bondades de una herramienta económica como los acuerdos de libre comercio, que, bien manejadas desembocan en buenos resultados.
También subrayó el pasaje a una segunda instancia en el desarrollo del “Plan Puebla Panamá”, una iniciativa en infraestructura y energía que ha recibido muchos rechazos desde América Central. Fox apuntó al sector energético y considera que puede llegar a ser “una palanca poderosa que mueva las economías de la región”. El problema energético es muy delicado, erosionando el poder adquisitivo de los hogares, continuó el mandatario, y planteó como solución inversiones en usinas de generación eléctrica. También está prevista la instalación de una refinería de petróleo con una capacidad de 250 millones de barriles diarios. A su vez, el gas producido sería distribuido por un gasoducto que recorrería toda la región.
Siguiendo con el tema comercial, pero relacionándolo esta vez con la cumbre, Fox recordó que cuatro años atrás todos los gobernantes de las Américas firmaron en Québec (Canadá) el interés en utilizar el libre comercio para mejorar el empleo y el ingreso de las poblaciones latinoamericanas, como forma de disminuir la pobreza y mejorar la distribución.
Fox, que se convirtió en una de los firmes promotores de reflotar el ALCA, reivindicó los tratados de libre comercio aún en casos de las asimetrías, de alguna manera contestando las posiciones como la del MERCOSUR. Según el presidente mexicano el libre comercio siempre hace ganar a los socios, siendo una manera de generar empleo, protegerlo y mejorar el ingreso de ese empleo. “Los acuerdos de integración funcionan”, México lo ha experimentado tanto a través de su relación con Chile, como con EE.UU. o Costa Rica.
El jefe de estado mexicano recordó que su país tiene 42 acuerdos comerciales firmados, y todos son diferentes. Y enfatizó que “si seguimos inventando la rueda” estamos cerrando el camino de las oportunidades a nuestros pobres, condenándolos a mayor pobreza. Tomó el ejemplo de China como los campeones del comercio, como el país que basa su fuerte crecimiento en el comercio y que ha demostrado su intención de avanzar en ese sentido al incorporarse a la OMC. Y a continuación se centró en un tema urticante: recordó que entre los países de las Américas, 29 están dispuestos a poner sobre la mesa el tema del ALCA junto con la creatividad, dejando así en evidencia a cinco naciones que no apoyan esa idea (los cuatro miembros plenos del MERCOSUR y Venezuela).
Como contrapartida Fox volvió a reflotar la idea de convertir a México en un miembro del MERCOSUR, y apuntó a lograrlo antes de mediados del próximo año. Sostuvo que en ese sentido tuvo conversaciones con los gobiernos de Brasil y Uruguay en el marco de la Cumbre. Respecto a la aparente contradicción entre la posición mexicana de ALCA sin MERCOSUR frente el interés de pasar a formar parte de ese acuerdo comercial, el mandatario contestó: “yo amo a los dos ALCA y MERCOSUR, y si mis propuestas no son escuchadas seguiré insistiendo hasta que me escuchen”. Para Fox no son excluyentes las dos posiciones, ya que pretende formar parte del acuerdo de los países del sur, pero a la vez promueve fervientemente el ALCA. Si bien estos y otros dichos intentaron reducir la polémica que había generado especialmente en el gobierno argentino sus declaraciones anteriores, en realidad desnudaron una vez más las grandes diferencias que persisten en el continente.
P. Visca es analista de información en D3E (Desarrollo, Economía, Ecología y Equidad – América Latina).